alt



Steve Tesich, Seix & Barral, junio 2013 (19,90€)

 Libro electrónico (ePub), 13,99€

Título original: Karoo

Traducción: Javier Calvo

 

De entre mi abultada bolsa de libros para agosto, tengo que recomendar encarecidamente esta de la que voy a hablar ahora. Tiene 556 págs. y últimamente me asustan los libros grandes, pero la cogí y ya no la solté hasta que no la terminé, que fué exactamente tres días después.

Absolutamente imprescindible para aquellos/as que «disfruten» de las desgracias ajenas (merecidas) contadas con humor, de la buena escritura, del humor salvaje y negro, la ironía sin piedad, de historias que nos pueden pasar a todos y que te hacen reflexionar. Una joya.

Copiando la excelente crítica de Francisco Aranguren me pregunto, me contesto y hago mías sus palabras (a excepción de lo de Sotogrande, que dudo que nadie que verane allí sea capaz de leer esta delicatesen) «…¿A quién recomendaría leer esta novela? A los cincuentones que se miran al espejo y presienten que algo está acabando en sus vidas o bien algo está a punto de empezar, aunque ni lo uno ni lo otro ha sucedido todavía. A los padres que no son capaces de compartir su intimidad con sus hijos y se preguntan si verdaderamente les quieren…pero les asusta terriblemente quedarse a solas con ellos. A los hijos que no han recibido el amor de sus padres y sienten que nunca podrán querer verdaderamente a alguien si antes no experimentan ese amor que les falta. A los que no pueden dejar el tabaco y cuando lo dejan quieren una justificación para volver a él. A los que se separan y no quieren romper del todo con sus parejas. A los que mienten por sistema, pero se dicen a sí mismos que al mentir, de alguna forma afirman la existencia de la verdad y no son tan malos como aquellos que niegan que cualquier verdad exista. A los que creen poder ayudar a otros diciéndoles la verdad. A los que no creen que sea posible encontrar a los cincuenta el amor verdadero, que te permita descubrir en ti tu alma verdadera. A los que quieran entender un poco el mundo del cine y de Hollywood, en particular. A los que dudan sobre la autoría de una obra de arte. Y sobre todo, a quienes disfruten de una novela bien escrita. A los que quieran reírse y pasarlo bien con un autor inteligente. Y a los que quieran conocer a un tipo odioso del que es posible acabar enamorándose…»

Karoo se publicó en Estados Unidos en 1998, dos años después de la muerte de su autor y aunque recibió buenas críticas pasó prácticamente desapercibida a pesar de las recomendaciones de Arthur Miller o Doctorow. Y no sirvió de nada que popes como Doctorow y Arthur Miller le hubieran dedicado entregadas recomendaciones. En febrero de 2012, una pequeña editorial francesa sita en Tolousse y fundada en 2004, Monsieur Toussaint Louverture, recuperó la obra con traducción de Anne Vicke. La edición recibió el premio Prix Mémorable, que las librerías independientes francesas conceden a obras inéditas o que han pasado desapercibidas.

El protagonista, Saul «Doc» Karoo, es un hombre ,cincuentón alcohólico, obeso, divorciado, con un hijo adoptivo con el que apenas tiene trato y cuyo trabajo es la de un buen guionista experto en rehacer los guiones de otros para que se ajusten al sistema hollywodiense de tener éxito, luego dinero. Un trabajo lucrativo que le ha llevado a vivir de manera muy lujosa y que le encanta.

Su vida, podríamos decir, se nos va desvelando en tres partes. En la primera, es una ruina de hombre que, siendo alcohólico por afición y devoción, no se puede emborrachar, cosa que detesta, porque su vida no le gusta, aunque no sea muy consciente de ello: miente por sistema y hace daño a todo el mundo, especialmente a la gente que más quiere.

En una segunda parte intenta corregir esa vida y esa actitud centrándose especialmente en la relación con su hijo Billy y con la madre biológica de éste, Leila, a la que conoce casi por casualidad. En la tercera parte, ocurre la tragedia de una vida en exceso egocéntrica y sin sentido.

Martínez Hidalgo señala muy acertadamente que «…Esta novela es una reflexión de fondo sobre las miserias de la vida. Sobre lo difícil que es ser quien eres cuando todo el mundo espera de ti que seas otra persona, y en qué puede transformarse la existencia cuando este proceso te lleva a desarrollar una dualidad radical (casi un desdoblamiento de personalidad) entre tu «yo íntimo» y tu «yo social» –como el mismo Karoo afirma sentir en no pocas ocasiones. Ambas personalidades se cruzan, se mezclan, se influyen la una a la otra, hasta que para uno mismo entre el Ser y el Parecer no hay diferencias claras sino solo un mar de confusiones, dudas y malestares. En este momento se encuentra Karoo, a esta sensación de desorientación existencial llega, y de ella quiere salir mientras nos muestra una forma de existir (que no de Ser) muy habitual en nuestra sociedad…».

¿No nos hemos encontrado alguna vez en nuestra vida con esta misma dualidad?. Yo sí, desde luego, aunque sin llegar a los extremos de Karoo.


alt


Steve Tesich nació en Užice, en la actual Serbia, en 1942. A los catorce años emigró a Estados Unidos con su familia. Estudió en la Universidad de Indiana y en Columbia, y escribió diversas obras de teatro y guiones. Entre sus guiones destacan El relevo, por el que fue galardonado con un Oscar, y la adaptación de El mundo según Garp. En 1982 publicó su primera novela, Summer Crossing. Su vida se sumía en la rutina del trabajo incesante pero discreto. Los años pasaron sin que los éxitos de antaño regresasen. Su normalidad estaba más centrada en evitar que los guiones de otros supusieran un fracaso rotundo para las productoras, que en repetir los viejos éxitos del pasado. Sin embargo, la vena creativa estaba ahí, necesitaba salir, encontrar un camino a través del cual canalizarse, y esa era la novela que tenía en sus cajones, en gran parte inspirada en sí mismo, de nombre provisional ‘Karoo’.

Un infarto acabó inesperadamente con la vida de Steve Tesich cuando tenía cincuenta y tres años, y pocos días después de dar por terminada la escritura de la que iba a ser su primera novela, que se publicó dos años después de su muerte, en 1998, por una minúscula productora cinematográfica: Bambino Productions en 1998.

 

Fuentes:

http://www.ritmosxxi.com/humor-estado-puro-karoo-steve-tesich-9501.htm

http://franciscoaranguren.blogspot.com.es/2013/08/karoo-de-steve-tesich.html

http://en.wikipedia.org/wiki/Steve_Tesich

http://www.fantasymundo.com/articulos/5506/karoo_steve_tesich

http://www.jotdown.es/2013/06/el-hombre-que-no-fue-woody-allen/

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

GrupoUnetcom